Touching The Bottom

por Lilith Dom Mayo 22, 2011 8:24 pm

Mi primera historia en la que trato de reflejar todo el mundo en que me he involucrado, soy una tonta por ello pero no puedo evitar escribir sobre ello jajaja
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Mucha gente trata de negarlo, pero para Camila ya era una obviedad, el mundo está plagado de mentiras, algunas salen a la luz, pero la más hiriente para ella (aun que no podía ver la verdad) era verse en el espejo y afrontar aquella mentira, vivir con ella, torturarse cada día viendo en su reflejo la mentira más grande que su mente pudo haber creado. ¡Gorda! Era lo único que ella podía pensar. La verdad es que todas las chicas de su edad se han mirado al espejo con disgusto, viendo que tienen algún rollo de sobra o que no tienen las curvas o la firmeza ¿Qué te dan como modelo de la vida perfecta.

Ella tenía un gran dilema. De seguro muchos de ustedes se han dado cuenta de que hay dos grandes cosas con las que te bombardean lo medios. La primera, comida chatarra, no hay calle en cualquier vecindario que no tenga un letrero patrocinando una hamburguesa o un helado, donde te incitan a comprar comida cada vez más calórica. Y la segunda, la delgadez, modelos delgadas y agraciadas en todas partes, en cualquiera propaganda, incluso en las de pasta de dientes, todas y cada una con aquel cuerpo perfecto que tratan de venderles a las chicas de cualquier edad.

Como se habrán dado cuenta es una enorme paradoja. Supuestamente las chicas han de tener un cuerpo perfecto y a la vez comer comida chatarra, una locura incompatible, a tal punto que es peor que la rivalidad entre el creacionismo y el darwinismo. Así que las mujeres se ven obligadas a elegir, unas se entregan a los placeres mundanos y comen cada comida que ven en los anuncios, mientras que otras deciden ser seguidoras de aquellas modelos… algunas, hasta los extremos.

Camila del grupo de las últimas. Decidió tener un cuerpo perfecto luego de haber pasado por el camino más desastroso que ella era capaz de imaginar, y eso que ella tenía una muy grande imaginación. Si indagamos un poco en su pasado probablemente encontremos el motivo de porqué había llegado tanto al extremo, así que, viajemos cinco años atrás…

Una pelirroja estaba sentada en unas escaleras bastante escondidas en su escuela, había terminado de almorzar y ahora disfrutaba de su soledad, la verdad es que nunca tuvo un amigo de verdad, por eso siempre estaba sola, pero con el tiempo había aprendido a restarle importancia. Podía escuchar como los demás niños jugaban y un par de conversaciones, pero ninguna le llamaba la atención en particular, claro, hasta que escuchó como su nombre era por dos de los chicos más populares del salón.

“¿Y que tal Camila?” pudo reconocer la voz de Leonardo y eso captó instantáneamente su atención.

“Si igual ella no es tan gorda” contestó Manuel.

Y eso le destrozó el mundo a la ojiverde, tomó su bolso y salió corriendo en dirección al baño, cerró la puerta de entrada con llave tras asegurarse de que no había nadie. Entonces se miró al espejo.

Nunca se había considerado gorda, sólo de caderas anchas y muslos un poco más grandes que los de las otras chicas, pero ahora se puso a inspeccionar minuciosamente cada parte de su cuerpo. Se levantó la remera con la insignia del colegio y se fijó en su abdomen, primero de frente y luego de perfil, estaba un tanto abultado porque acababa de comer, luego sus manos vagaron hasta sus piernas, eran largas pero bastante… bien, no quería admitirlo, pero ciertamente eran gordas… entonces agarró valor (o más bien como un acto de cobardía) y fue hasta un cubículo, se arrodilló frente al inodoro y miró detenidamente dentro de él, juntó los dedos índice y corazón de su mano derecha y los introdujo en su boca hasta rozar su campanilla, sintió una fuerte arcada y rápidamente los retiró para luego volver a introducirlos con más fuerza, entonces expulsó gran parte de la comida que había consumido, pero no se detuvo ahí, volvió a provocarse arcadas hasta estar segura de que ya no quedaba nada en su estómago.

Se quedó mirando unos instantes a los pedazos de comida que flotaban en el agua de un color turbio al estar mezclada con bebida, jaló la cadena tres veces para asegurarse de que no quedara el más mínimo rastro de lo que había ocurrido. Fue hasta el lavamanos y se lavó una y otra vez las manos y la boca, tratando de eliminar el olor del vómito. Salió del lugar como si nada y se dirigió a su siguiente clase. Ese fue el comienzo de todo.

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Ahora creo que les toca a ustedes, dicen si les gusta y si vale la pena seguirla, pero les aseguro que si nos les gusta o les molesta la quitaré, y no me molestaré, todos estaremos felices pase lo que pase (:

por Lily sabaku no Lun Mayo 23, 2011 3:01 pm

>u< ¡ Escribes maravillosamente! Ya quisiera escribir yo así, pero soy tan vaga que me da weba xD

Hum, me quede pica la curiosidad!! Ya quiero saber lo que le sucede a Camila! Espero la continuación!!!

Saludos!

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Re: Touching The Bottom